Seguramente sientes odio o rencor. O tal vez no tanto, pero sí rabia y sientes que es injusto. Esto pasa y mucho. Que una persona te haga ver el cielo y luego ni te conteste o ni te mire, o incluso que te mande a comer pasto de una forma estúpida, es algo que se da en miles de inicio de relaciones. Así termina el sueño iniciado.
Sea cual sea el motivo, al principio todo parece bonito, y piensas que esta vez será la definitiva, pero llega ese día en el que no comprendes que es lo que está pasando y tus lágrimas vienen de visita para acariciar tu bella piel del rostro ¿Triste verdad?
Pero, llegados aquí, no sufras más y:
No lo busques, no lo llames, no le vayas detrás, aparta ese capítulo de amor efímero pasado de tu vida, de una forma sabia. No lo odies ni le insultes. Respétalo y trátalo, si lo ves, de una forma correcta. No huyas de él y que no te dé miedo frecuentar lugares donde lo verás.
Recuerda que has apartado ese capítulo de tu vida y que ahora empiezas uno de nuevo en el cual tú no perderás la dignidad y en el cual no serás quien se esconda por miedo a verlo o por miedo a qué decir ante él.
¡Qué le vaya lindo!, que a ti te irá preciso amiga. ¡Así será!
Si lo ves, lo saludas normal, le preguntas cómo está y le deseas lo mejor. Pero jamás bajarás la mirada por vergüenza o por cualquier emoción que sientas. Tú ve de frente y con amor propio di por dentro: “Yo estoy aquí” “¡lo qué te has perdido!”
Sé que pensarás:
¡Sí, pero cuesta, aún lo amo! Pero créeme, no lo amas tanto. Sólo era una persona que te vendió el cielo y te movió el alma, pero amiga, durante el enamoramiento esto es normal. El enamoramiento ciega mucho e incluso después de que te haya mentido, utilizado o tratado mal, puedes seguir creyendo que era el indicado y que lo amas.
Pero no esa así. Si lo amaras mucho, sería porque él sigue a tu lado y porque él nunca te ha creado dudas en ti. Amar es una decisión y así cómo decides darlo todo por una persona, ahora, sólo debes tomar la decisión de dejar de amarlo. De no dar nada más por él. Bueno sí, un “buenos días” con dignidad y con una sonrisa que lo dejará helado. Créeme.
Ahora ten tranquilidad, no te apures. Sólo sigue haciendo tu hermosa vida. Llevas miles de horas vivida. ¡MILES! y él sólo ha participado unas poquitas en tu hermoso camino.
¿Cómo sería posible que manche tu vida alguien así!
No dejes que apague la luz de tu interior quien no te merece. Menos este tipo que no te ha amado y que se ha aprovechado de ti. Que te ha ilusionado.
Dale una lección siendo tú misma y saliendo a comerte el mundo. Encontrando todo aquello que mereces y demostrando que él sólo fue una piedra en el camino. Una que saltaste para seguir con tus pasos firmes hacia la dirección que hoy seguirás.
Sonríe amiga mía, que la vida y tú sois hermosas y él para ti ya no.